Aun sin esperar nada de ellos, nos sorprenden.

Aun cuando su aprobación es del 7%, siguen gobernando para los suyos. Dejando al 93 restante (casi 17 millones de chilenos) fuera de las medidas que, según el papel, benefician a la mayoría.

En sus mentes piensan, ilusamente, que “hicieron la pega”. Que con ese paquete de medidas que lanzan entre lunes y jueves, están listos con su misión y obligación de “gobernar para tod@s”.

Pero, como dice el dicho, siempre se puede estar peor. La última: Este fin de semana no se entregarán salvoconductos para salir a comprar, por lo que las ferias libres no funcionarán como es habitual. Sin embargo, los bisnietos de los Chicago Boys idearon la solución “perfecta” al problema de abastecimiento: Feria con Delivery.

Han sido tan ineficientes en el arte de gobernar, que no sería sorpresa que, en un par de años, se sepa que realmente la idea fue sacada de alguna tía o prima de un ministro. Esa esforzada y emprendedora parienta, que se aventura todas las mañanas hacia la Vega Central, para luego revender el kilo de manzanas a 3.500. “El mercado da para todos”, dirán los defensores de Smith y Friedman. Pero en Chile, cualquier verdulería con el prefijo “Emporio”, tiene el derecho inexorable de venderte la mata de apio a 5 lucas.

Claro, para ellos el negocio está listo. Te cobran la cabeza de ajo a 1.500, pero con entrega gratis.

Lamentablemente, señores Gobierno, esa no es la realidad de la mayoría (si la última frase les sonó repetitiva, abogo a su autocrítica).

De las 345 comunas del plan paso a paso, 284 (82%) se encuentran en fase 1 o 2. Es decir, que sus habitantes requieren de un permiso especial para desplazarse durante los fines de semana. En resumen, cerca del 80% de los ciudadanos no podrán acudir a supermercados ni ferias libres, de manera presencial, durante este fin de semana.

¿Qué pasa con las comunas donde no existe delivery? Los feriantes del mercado de Puerto Montt, por ejemplo. ¿Sabrá el gobierno que existe un grupo de mujeres chilotas, que su único ingreso es la venta de verduras y hortalizas que cosechan durante la semana? ¿Qué pasa con aquellos que no tienen un canal de ventas como los grandes supermercados?

Dicen que se reunieron con la asociación de feriantes y de abastecimiento. Que agradecen el esfuerzo de ambos por apoyar la medida. La cual busca reducir los contagios por Covid, que los últimos días han bordeado los 5.000 casos confirmados.

Sin embargo, irónicamente, el Costanera Center, ese gran palacio del Retail, estará abierto a todo público este fin de semana. Si, hay que acudir con salvoconducto, pero dentro de sus 5 pisos podrán circular libremente hasta 3.600 personas, sin reglas de distanciamiento social y escasos controles a los aforos permitidos.

¿Acaso un tomate es más contagioso que una chaqueta de H&M?

¿Qué tiene Paulmann, que no tenga la señora Tita, mi casera de los domingos? ¿Qué tiene Zara, que no tenga la pescadería de don Pedro?

Creo que la respuesta está en su agenda telefónica.

Así, el feriante común y corriente, ese que te topas en la calle camino al almacén, es quien está dando cara para afrontar el alto índice de contagios. Por su contraparte, los de terno y corbata, esos que hacen lobby llamando al teléfono personal del presidente (o al de Sutil), siguen calculando, cuanto ingreso recuperarán este fin de semana.

Este gobierno ha tomado medidas tan fuera de lugar, que no sorprendería ver a Piñera vendiendo pan de pascua para el 18”.

La historia sigue igual, al que gana mas se le ayuda a que pierda poco. En cambio, el que gana menos, debe hacer malabares para tener un kilo de pan a la hora de once. Y mas encima, es quien debe sacrificarse por el de al lado.

Tal vez deberíamos cambiar nuestra forma de pensar y ponerle “Emporio” a todo nuevo emprendimiento, para así marginar el triple. Pero no, yo prefiero mi carrito y a Doña Tita, que me vende a luca la mata de apio.