El narcisismo de la Soledad
Ya no soy tan joven, y no creo necesario el asombro. Las evidentes marcas de expresión me darían pase libre en cualquier asilo. Y el hígado… bueno, está jugando gratis desde los 25. Cuando voy al gimnasio, la rodilla funciona como un metrónomo en cada sentadilla. Es lo que recuerdo de las pocas veces vez […]