Santiago, has dejado
amores olvidados
viudas de rojo vestir
carnavales deportivos
más de un millón de puños en alto
huellas de tanque en la solera
también de rodillas inclinadas
secretos en los estadios
ecos de auxilio
La montaña testigo
silencio ensimismado
Gobernantes populistas
asesores de contrabando
Bocinas en las esquinas
tabernas telúricas
hospitales colapsados
Un penal picado
el cóndor vuela en lo alto
Inviernistas sin cuenta corriente
Veranistas sudando en el campo
calles progresistas
avenidas republicanas
tierrales populistas
un cielo puro azulado
Perros en las calles
un río oscuro a lo ancho
Casas que bailan
al ritmo del viento de octubre
La puerta al extranjero
trasera si es peruano
Gente parca
mocos colgando
Eso veo
cuando camino por tus calles
Santiago