los años olvidaron la metáfora
Ya pocos comentan lo que quiso decir aquel poeta cubierto en agonía
Qué amor le robó el desierto
cuántas sábanas atrapó su piel.
La verdad curtida en lo precario
ataca oídos moralistas
Se entrega desnuda al abismo
erupciona pudor en las altas esferas
la Lírica cruda
condimenta un presente monótono de ritmos
llama la atención de corbatas y ternos
Hace bailar totos y masas
Bendita juventud,
algoritmo liberador
Amarraste los discos, quemaste las cintas
rescataste del abismo voces olvidadas
hiciste a las estatuas arrodillarse por un feat
Maldito Rock & Roll,
dejaste a tus profetas olvidados
y enfermizos
Antiguas esculturas niegan arrodillarse
las no tan viejas lo hicieron hace tiempo
Quisieron seguir la senda del vino
cambiaron su ego por años de vida
Las marcas dejaron de estar en su infancia
ahora los llaman y agrandan sus cuentas
Todo es negocio en el negocio nuevo
tomar gaseosa
afiches del metro
Cambiar el BM pegando una barra
llenar el VIP en alguna fiesta
Envidias y ceños contemplan en silencio
el oasis que pisa el desierto prometido
A lo lejos, una gárgola grita
El desamor existe
gente miedosa, también
Por qué no cantan al amor
¿Acaso temen ser amados?
Lujurias grupales a poca luz, responden con ironía
Pianos distorsionados repiten secuencias
voces armonizadas mienten a la cara
El vecino enfrente lleva el parlante
Su primo lejano prepara la sala
Pastores intransigentes,
de los Beatles dijeron lo mismo
¡Herejes!
¡Acordes inescuchables!
¡Letras indecorosas!
facheros bien vestidos
guitarras sincronizadas
El ímpetu de rebeldía
creyendo la eternidad como algo propio
Submarinos oxidados de amarillos
los ayeres mirando en la vereda
Si mandas la ubi, prendo la nave
Baby contigo quiero la cena
El pentagrama agonizando en el museo
esquinas arrumbadas en guitarras
acordes complejos jubilados y enfermizos
no hay gorriones ni gitanos en la plaza
Amores platónicos atemporales
conquistan tiempo en el corto plazo
Los besos de 3 ya son normales
los que se dan con la memoria
un mal presagio
Azulejos ya no maldicen las poetas
finas de etiqueta, no se acomplejan
jalan gatillos
fuman el fino
Derrapan curvas sin culpa
entre Versases
Ya no preguntamos al cielo la desdicha de nuestro presente
Lluvia de plomo a los giles
sudor en camas diferentes
No fuma sola de noche
prefiere quemar con besos dementes
Chipetazo en la noche los viernes
falsas ovejas de carabina
El abuso del tío presente
la inocencia perdida en la esquina
La ropa que faltó cuando chico
la pensión que nada alcanzaba
el beat del hijo profeta
un pasado rasgando las letras
la tinta que ahora no tiembla
asegura un palo de vuelta
Barrios acomodados abren sus puertas
a lo nuevo, lo chulo
“No lo vimos venir”, dirán sus tertulias
Los cuentos de Disney no tienen sentido
La última cena colgando
la 40 en la guantera
Amenazas
la mesa rosada invitando a besarle
El hoy jugando al intento
de ir un poco más lento
El corazón, a veces contento
las pocas
que lo protejo
Enemigos invisibles
la yuta
celulares pinchados
Todos quieren su parte
y solo el narco pobre conoce la cana
Los poetas evolucionaron
un corazón roto no paga cuentas
Una pelá a cuatro barras
cambia el refri,
el ego
la mala yerba
Distinto
malo
bueno
de lo eterno, no sabemos
en el Sheraton te espero
Áspero
Rústico
Tóxico
Honesto
Con lo último me quedo, profetizo
La sinceridad, merece ser escuchada
en los libros, entre prosas
o perreando, a lo Maldito.