Los poetas ya no escriben al amor

@Leolao

los años olvidaron la metáfora

Ya pocos comentan lo que quiso decir                    aquel poeta cubierto en agonía

Qué amor le robó el desierto

cuántas sábanas atrapó su piel.

 

 

La verdad curtida en lo precario                              

ataca oídos moralistas

Se entrega desnuda al abismo

erupciona pudor              en las altas esferas

 

 

la Lírica cruda                   

condimenta un presente monótono de ritmos

llama la atención de corbatas y ternos

Hace bailar totos y masas

 

 

Bendita juventud,          

algoritmo liberador        

Amarraste los discos, quemaste las cintas

rescataste del abismo          voces olvidadas

hiciste a las estatuas                       arrodillarse por un feat

 

 

Maldito Rock & Roll,                      

dejaste a tus profetas olvidados

y enfermizos

 

 

Antiguas esculturas niegan arrodillarse

las no tan viejas lo hicieron hace tiempo

Quisieron seguir la senda del vino

cambiaron su ego por años de vida

 

 

Las marcas dejaron de estar en su infancia

ahora los llaman               y agrandan sus cuentas

 

 

Todo es negocio                               en el negocio nuevo

tomar gaseosa

afiches del metro

Cambiar el BM pegando una barra

llenar el VIP en alguna fiesta

 

 

Envidias y ceños           contemplan en silencio

el oasis que pisa el desierto prometido

 

 

A lo lejos, una gárgola grita

El desamor existe

gente miedosa, también

Por qué no cantan al amor         

¿Acaso temen ser amados?

Lujurias grupales a poca luz,                       responden con ironía

 

 

Pianos distorsionados repiten secuencias

voces armonizadas mienten a la cara

El vecino enfrente            lleva el parlante

Su primo lejano                prepara la sala

 

 

Pastores intransigentes,

de los Beatles                    dijeron lo mismo

¡Herejes!

¡Acordes inescuchables!

¡Letras indecorosas!

 

 

facheros bien vestidos

guitarras sincronizadas

El ímpetu de rebeldía                    

creyendo la eternidad como algo propio

 

 

Submarinos oxidados                     de amarillos

los ayeres mirando en la vereda

Si mandas la ubi, prendo la nave

Baby contigo quiero la cena

 

 

El pentagrama agonizando en el museo

esquinas arrumbadas en guitarras

acordes complejos                          jubilados y enfermizos

no hay gorriones ni gitanos en la plaza

 

 

Amores platónicos atemporales

conquistan tiempo en el corto plazo

Los besos de 3 ya son normales

los que se dan con la memoria

un mal presagio

 

 

Azulejos ya                         no maldicen las poetas

finas de etiqueta, no se acomplejan

jalan gatillos

fuman el fino

Derrapan curvas                               sin culpa

entre Versases

 

 

Ya no preguntamos al cielo                        la desdicha de nuestro presente

Lluvia de plomo a los giles

sudor    en camas diferentes

No fuma sola de noche

prefiere quemar               con besos dementes

 

 

                        Chipetazo en la noche los viernes

falsas ovejas de carabina

El abuso del tío presente

la inocencia perdida en la esquina

 

La ropa que faltó cuando chico

la pensión que nada alcanzaba

 

el beat                  del hijo profeta

un pasado           rasgando las letras

la tinta                  que ahora no tiembla

asegura                un palo de vuelta

 

 

Barrios acomodados abren sus puertas

a lo nuevo, lo chulo

“No lo vimos venir”, dirán sus tertulias

Los cuentos de Disney no tienen sentido

 

 

La última cena colgando

la 40 en la guantera

Amenazas

la mesa rosada invitando a besarle

 

 

El hoy jugando al intento

de ir un poco más lento

El corazón, a veces contento

las pocas                            

que lo protejo

 

 

Enemigos invisibles

la yuta

celulares pinchados

Todos quieren su parte

y solo el narco pobre      conoce la cana

 

 

Los poetas evolucionaron

un corazón roto no paga cuentas

Una pelá a cuatro barras

cambia el refri,

el ego

la mala yerba

 

 

Distinto

                malo

                bueno

de lo eterno,      no sabemos

en el Sheraton te espero

 

 

                Áspero

                               Rústico

                                               Tóxico

Honesto             

     

 

Con lo último me quedo, profetizo

La sinceridad,    merece ser escuchada

en los libros,       entre prosas

o perreando,      a lo Maldito.

!Compártelo!

Post Relacionados

Suscríbete

!Mantente al día con los últimos post!

***Revisa tu casilla «Promociones» o «Social»